La práctica sistemática e incorporación de políticas favorables para las familias en las empresas, no solo benefician a las personas empleadas, sino que los resultados de la conciliación entre la vida familiar y laboral contribuyen a diversos beneficios para las organizaciones empleadoras. A continuación, hablaremos sobre la importancia de la flexibilidad y empatía empresarial para alcanzar las metas de la mejor manera, promoviendo un ambiente laboral favorable para la retención laboral y orgullo de pertenencia.
Para las personas que tienen familia, es muy importante encontrarse con la comprensión de su compañía para continuar atendiendo ambas responsabilidades, tanto en casa como en el trabajo. Las ventajas que las normas enfocadas a la familia ofrecen ayudan a “reducir el estrés parental y promover el bienestar de las madres y los padres, lo que a su vez redunda en unas familias más felices y niños y niñas más sanos” nos dice la UNICEF.
Lo único que puede surgir de ser una empresa más inclusiva familiarmente hablando son beneficios, ya que las familias tienen la necesidad de buscar cómo responder a sus necesidades particulares y, a diferencia de las décadas pasadas, ya no hay un solo cuidador principal en un rol establecido. La diversidad de las familias es amplia: hay familias co-parentales, homoparentales o monoparentales, y la inclusión de su diversidad es un factor determinante para el desarrollo de sus competencias personales y profesionales. Por ello, el abanico de oferta laboral de la empresa debe ser tan amplio como su exigencia, ofreciendo prestaciones con horarios laborales flexibles o remuneraciones importantes para el cuidado de la familia. Esto incrementa los niveles de compromiso y concentración laboral de las personas empleadas ya que se sienten escuchadas, vistas y consideradas, por lo que están dispuestas a reciprocar el apoyo con resultados en su trabajo.
La adecuada implementación de las políticas family-friendly en el trabajo promueve la productividad laboral, y se pueden considerar aquellas prestaciones que permitan a padres y madres priorizar el cuidado de sus hijos o hijas cuando sea necesario, extendiéndose a sus seres queridos. Esto incrementa la confianza en el equipo de trabajo y en las personas en cargos directivos que a su vez, se traduce en un ambiente laboral positivo, pues reconocen las necesidades externas y personales.
La confianza de las personas empleadas a quienes se les permite concentrarse en sus familias cuando es necesario hacerlo, mejora su concentración en el ámbito laboral, ya que saben que en caso de surgir una situación familiar precaria, podrán atenderla sin repercusiones o afectaciones. El estrés se reduce al contar con el tiempo y flexibilidad para atender asuntos familiares que requieran su atención, en vez de dividirla entre el trabajo y el hogar. De acuerdo con Forbes el 66% de los padres y madres se preocupan más por pasar tiempo con sus hijos o hijas, lo que es importante en México, el país que más apoya el trabajo remoto de América Latina por la misma razón.
La reducción de rotación de personal es una consecuencia directa de aquellas empresas que ofrecen políticas favorables para familias como los periodos de maternidad y paternidad, periodos de adopción y/o periodos de enfermedad, pues demuestra a las personas empleadas lo importantes que son para la empresa al considerar sus necesidades personales. Esto permite a la fuerza laboral difundir con orgullo la reputación de su empresa, atrayendo posible talento a ella.
Contar con el apoyo de la empresa para atender asuntos familiares, permite a las personas tener más tiempo para asistir a cursos o sesiones de formación profesional, y poder incrementar sus competencias laborales.
El trabajo remoto es una opción que las empresas pueden ofrecer a las familias para promover un ambiente laboral inclusivo, pues permite desenvolver y adaptar los tiempos de trabajo según las necesidades particulares de cada familia para las tareas domésticas. Los horarios flexibles o cortados también pueden ser otra excelente alternativa para dividir el tiempo entre el hogar y el trabajo.
Decidir qué políticas implementar puede ser un trabajo abrumador. Las empresas pueden utilizar a su departamento de RRHH para realizar encuestas y sondeos al respecto, acercándose a las personas con familias que atender y realizando preguntas pertinentes para crea un esquema aproximado de sus necesidades.
Algunas preguntas que las empresas pueden hacer para resolver y determinar las políticas family-friendly son:
A partir de estas preguntas, las compañías pueden reformular o implementar nuevas políticas favorables para las familias, y dar a conocer sus beneficios a todo el talento contratado, permitiéndoles entender la extensión de cada una de ellas. Responder estas preguntas permitirá a la fuerza laboral sentirse escuchada y al departamento de RRHH modificar o reforzar las políticas para que las familias puedan coexistir sin repercutir en la productividad de la empresa. Es importante mantenerlas actualizadas ya que los tiempos y las necesidades de las familias evolucionan constantemente.